Tratamiento farmacológico
Aviso importante: La siguiente información es solo de carácter informativo. Ningún contenido reemplaza el consejo médico profesional. Consulte siempre con un especialista antes de iniciar o cambiar un tratamiento. La asociación no se hace responsable del uso indebido de estos datos. Cada paciente es diferente, y un médico debe supervisar cualquier terapia.
Selumetinib (Koselugo)
AstraZeneca (2021)
Selumetinib es un inhibidor de MEK (fármaco que bloquea proteínas quinasas MEK1/2, las cuales transmiten señales que estimulan el crecimiento de tumores) indicado específicamente para la neurofibromatosis tipo 1 (NF1) con neurofibromas plexiformes sintomáticos e inoperables en pacientes pediátricos a partir de 3 años. Fue aprobado en 2021 en Europa tras demostrar por primera vez eficacia para reducir estos tumores en NF1. De hecho, en los ensayos clínicos se observó que Selumetinib (comercializado como Koselugo) reduce el volumen de los neurofibromas plexiformes, lo que ayuda a aliviar síntomas como el dolor. Este medicamento oral se administra en cápsulas y su uso debe ser supervisado por médicos con experiencia en tumores relacionados con NF1.
En 2020, Selumetinib fue el primer fármaco aprobado (inicialmente por la FDA en EE.UU.) para tratar tumores plexiformes en niños con NF1. Actualmente, es el tratamiento de referencia para neurofibromas plexiformes pediátricos no operables. Sus efectos beneficiosos incluyen no solo reducción del tamaño tumoral sino también mejoría del dolor y de la necesidad de analgésicos, según estudios recientes en pacientes adultos. Los efectos secundarios más frecuentes de Selumetinib incluyen trastornos gastrointestinales (como vómitos, diarrea, náuseas), erupciones cutáneas, sequedad de piel y fatiga, entre otros. Estos efectos suelen ser manejables, pero subrayan la importancia de un seguimiento médico cercano durante el tratamiento.

Mirdametinib (Gomekli)
SpringWorks (Pendiente de aprobación en 2025)
Mirdametinib es otro inhibidor de MEK que actúa de forma similar a Selumetinib, desarrollado para tratar los neurofibromas plexiformes en NF1. A diferencia de Selumetinib, Mirdametinib está diseñado para pacientes de todas las edades (niños y adultos con NF1). En febrero de 2025 obtuvo aprobación en Estados Unidos (bajo el nombre comercial Gomekli) para pacientes desde 2 años en adelante con NF1 y plexiformes inoperables. En Europa, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) emitió en mayo de 2025 una opinión positiva recomendando su autorización condicional. Se espera una decisión final de la Comisión Europea en el tercer trimestre de 2025. De aprobarse, Mirdametinib sería la primera terapia en Europa autorizada para neurofibromas plexiformes tanto en adultos como en niños con NF1, cubriendo así un importante vacío terapéutico para pacientes mayores de 18 años.
Los ensayos clínicos con Mirdametinib (estudio ReNeu) han mostrado resultados prometedores: alrededor del 40-50% de los pacientes experimentaron reducción significativa del volumen tumoral. Muchos respondieron al tratamiento con disminución del tamaño del tumor en aproximadamente un 40% de media, acompañado de mejoras en el dolor y la calidad de vida. Los efectos secundarios más frecuentes fueron similares a los de Selumetinib (erupciones cutáneas, diarrea, náuseas, dolor muscular, fatiga, etc.), y se toleraron razonablemente.
Mirdametinib se administra por vía oral (en cápsulas o comprimidos dispersables). Aunque aún no está aprobado en España, su llegada se prevé inminente dado su beneficio clínico; por tanto, podría ponerse a disposición de pacientes españoles en los próximos 1–2 años si se confirma su autorización europea.

Bevacizumab (Avastin)
Roche (Uso en NF2 no indicado oficialmente)
Bevacizumab es un anticuerpo monoclonal anti-VEGF originalmente aprobado para ciertos tipos de cáncer, que se ha utilizado de forma compasiva o fuera de indicación en la neurofibromatosis tipo 2 (NF2). En NF2, los pacientes desarrollan schwannomas vestibulares (tumores en los nervios del oído) que pueden causar pérdida de audición. Bevacizumab (comercializado como Avastin) bloquea el factor de crecimiento vascular (VEGF), reduciendo la irrigación sanguínea del tumor. Se ha visto que en muchos pacientes con NF2 el Bevacizumab puede detener e incluso reducir el crecimiento de los schwannomas vestibulares, lo que a menudo conlleva una mejoría o estabilización de la audición y de síntomas como el tinnitus (ruido en el oído) y problemas de equilibrio. De hecho, este fármaco se ha vuelto un tratamiento ampliamente utilizado para los schwannomas en NF2 cuando la cirugía o la radioterapia no son viables.
Es importante destacar que el uso de Bevacizumab en NF2 no está oficialmente aprobado por las autoridades sanitarias para esta indicación; su empleo se basa en estudios y series clínicas que demuestran beneficio en algunos pacientes.
Los resultados varían: algunas personas experimentan mejoras claras en audición y reducción tumoral, mientras que en otras la respuesta es más limitada. Además, los efectos secundarios pueden ser significativos, ya que Bevacizumab puede causar hipertensión arterial, fatiga, problemas vasculares (por ejemplo, riesgo de sangrado o proteinuria en riñón) y otros efectos adversos frecuentes. Debido a estos riesgos y a la variabilidad en su efectividad, el tratamiento con Bevacizumab para NF2 se plantea caso por caso, evaluando cuidadosamente el balance entre posibles beneficios (preservar la audición, controlar el tumor) y riesgos.
En España, Bevacizumab está aprobado para cáncer desde 2005, y en pacientes con NF2 su uso requiere la supervisión de equipos médicos especializados (usualmente en Unidades de Referencia de NF2) y suele reservarse para tumores que provocan pérdida progresiva de audición.

Tratamientos tópicos en investigación (cremas y geles)
Dado que muchos neurofibromas cutáneos (tumores en la piel en NF1) son numerosos y pueden ser molestos o antiestéticos, se están explorando tratamientos tópicos (aplicados en la piel) para reducir su tamaño o número. Estas “cremas” o geles medicados buscan actuar directamente sobre el tumor cutáneo con menos efectos sistémicos. Aunque aún ninguno está aprobado para uso general, los ensayos clínicos recientes ofrecen esperanza:
Sirolimus tópico: Es un inhibidor de mTOR (una proteína reguladora del crecimiento celular). En forma de gel o pomada, se ha probado experimentalmente para tratar neurofibromas. Algunos informes de casos sugieren que la aplicación de sirolimus tópico podría aliviar el dolor asociado a neurofibromas plexiformes cutáneos severos e incluso frenar su crecimiento superficial. En un estudio piloto en pacientes con NF1, la crema de sirolimus mostró ser bien tolerada; aunque la reducción de tamaño de los tumores fue modesta, estos resultados preliminares apoyan continuar investigando esta opción. Cabe mencionar que sirolimus vía oral ya se había estudiado en NF1 con algunos beneficios en control del dolor y estabilización del volumen tumoral, por lo que la vía tópica podría concentrar el efecto en lesiones de la piel con menos toxicidad sistémica.
Gel de inhibidor MEK (NFX-179): Siguiendo el éxito de los inhibidores de MEK orales, se desarrolló un gel cutáneo experimental llamado NFX-179, que contiene un compuesto que bloquea la vía RAS/MAPK en la piel. En un ensayo clínico fase 2a, este gel se aplicó diariamente sobre neurofibromas cutáneos seleccionados. Los resultados mostraron que un 20% de los tumores tratados con la concentración más alta del gel redujeron su volumen a la mitad o más, mientras que en el grupo placebo solo un 6% lo hizo. Además, no se observaron efectos secundarios serios ni absorción significativa del fármaco en sangre durante las 4 semanas de tratamiento. Esto indica que el gel NFX-179 logró inhibir la señal tumoral localmente con excelente seguridad, representando una potencial terapia no invasiva para los neurofibromas de la piel en el futuro.
Imiquimod crema 5%: Es una crema inmunomoduladora (estimula el sistema inmune de la piel) que ya se usa para tratar verrugas virales y ciertos tumores cutáneos superficiales. Dado que los neurofibromas son tumores benignos, se evaluó si imiquimod podría señalizar al sistema inmune para atacarlos. En un estudio piloto con adultos NF1, se aplicó imiquimod 5% varias veces por semana sobre algunas lesiones, dejando otras sin tratar de control. Si bien el estudio fue pequeño, investigó la capacidad de frenar o revertir el crecimiento de los neurofibromas cutáneos. Los resultados no fueron concluyentes para una reducción significativa, pero aportaron datos sobre la seguridad de imiquimod en pieles con NF1. Actualmente no se utiliza de rutina, pero la investigación inmunológica continúa para hallar cremas efectivas.
Estos tratamientos tópicos aún se consideran experimentales. No están disponibles comercialmente en farmacias para NF, excepto en el contexto de ensayos clínicos o preparaciones magistrales que algunos hospitales podrían formular bajo protocolos de investigación. Sin embargo, representan una vía innovadora: el objetivo a mediano plazo es lograr que, combinando estas terapias locales, los pacientes con NF puedan controlar o disminuir numerosos neurofibromas cutáneos sin necesidad de múltiples cirugías. Conviene mantener expectativas realistas, por ahora las reducciones de tumor con cremas han sido parciales, pero los avances científicos en este campo son continuos.